El Valle de Ricote
Un auténtico vergel poblado de palmeras en el que el tiempo se detiene para hacer eternas las más extraordinarias sensaciones donde se puede percibir claramente la herencia árabe, entre otros, en sus sistemas de regadío.
El apacible discurrir del río es a través de meandros con árboles y campos de frutas, verduras y hortalizas. Ricote aún mantiene una rica tradición gastronómica, con el vino local como protagonista. Blanca conserva la herencia del esparto. 
En Abarán, el visitante puede recorrer una ruta que le conducirá a cuatro de las numerosas norias o artilugios cuyo función es elevar el agua del río para regar las vegas más lejanas. Los contrastes paisajísticos, hacen esta zona particularmente atractiva al visitante.
